Puede que no hayas pensado en la relevancia de este hecho, pero cumplir 40 años marca un antes y un después en la vida de cualquier persona. Y no es por el número, de hecho, es lo que menos importa aunque vaya explícito en el título que se le da a esta etapa «Crisis de los 40«. Es por el hecho de llegar a un punto de la vida, en la que si todo va bien, estás en la mitad e inevitablemente te asaltan dudas, preguntas, miedos, invitaciones a la reflexión… que te hacen sentir muchas veces vacío y perdido.
Crisis de los ¿40?
Como digo, no todo el mundo llega a esta crisis en el mismo momento ni de la misma forma. Se pueden acusar sus efectos antes o después del cambio de prefijo en tu edad. Precisamente por esto, se la conoce también como «Crisis de la mediana edad«. No obstante, los efectos suelen ser los mismos para todos.
Saber es poder
A lo largo de este Blog vamos a ir conociendo y familiarizándonos con esta etapa vital desde un punto de vista crítico y amable a la vez. Con curiosidad y sin miedo. Desde una perspectiva de aprendizaje y responsabilidad. Tomando consciencia de lo que está en nuestra mano hacer para poder mitigar los efectos y las consecuencias de atravesar esta etapa de la vida. Y finalmente, salir reforzados y siendo una versión auténtica y fuerte de uno mismo. Solo con conocimiento y voluntad se puede avanzar en una dirección distinta y de una forma correcta.
Tú tienes la solución
Con todo esto no quiero decir que esta sea la única forma de superar este bache en nuestro camino. Pero sí que esta es una forma proactiva de hacerlo y en la cual tomamos nosotros el timón de nuestro barco y dirigimos nuestra vida de una forma consciente. Creo que es uno de los mejores regalos que nos podemos hacer porque, lo creamos o no, nadie puede diseñar tu futuro mejor que tú.
Por último, también te invito a ir siguiendo las reflexiones que voy haciendo a lo largo de este proceso que van más allá del conocimiento estadístico o de los tips prácticos que se pueden ir aplicando. Son invitaciones a un paseo por tu mente que puede que sean como un bálsamo reconfortante o puede que sean como un pellizco incómodo pero necesario para sacarte de una ensoñación, pero de una forma u otra, activarán algo en tu interior que no te dejará indiferente.
¡Empieza a dirigir tu vida!
Allá vamos.